Se le vio caminando entre fusiles,
por una calle larga,
salir al campo frío,
aún con estrellas, de la madrugada.
mataron a Federico
cuando la luz asomaba.
El pelotón de verdugos no osó mirarle
la cara.
Todos cerraron los ojos;
rezaron: ¡ni Dios te salva!
Muerto cayó Federico
_sangre en el frente y plomo en las
entrañas_
...Que fue en Granada el crimen,
sabed _¡pobre Granada!_, en su
Granada.
Antonio Machado (A Federico García Lorca)
No hay comentarios:
Publicar un comentario