No os podéis imaginar lo que es el miedo en
una ciudad sitiada por el enemigo, el miedo que pasábamos cuando salíamos a la
calle a comprar, el miedo a que los francotiradores nos dispararan en cualquier
momento, temer por nuestras vidas y por las que estaban en torno a nosotros, las
lágrimas que caían por nuestro rostro simplemente al abrir la ventana y ver que
todo aquello con lo que teníamos algo en común, había desaparecido .Ya solo
quedaban algunos recuerdos un tanto borrosos por el paso del tiempo, algunos
malos, otros buenos, pero al fin y al cabo recuerdos.
Paula Rigueras Del
Hierro 2º ESO
Fuente imagen: http://drik.mx/01022012/newworld.html
me gusta tu relato
ResponderEliminar